jueves, 23 de noviembre de 2006

Mi perro Simón














Mi perro Simón es un animal muy extravagante... Sobre todo en su comportamiento, ya que si se considera que Paraguay es un país tropical y que nuestro invierno dura dos semanas, se puede inferir que el perro no precisamente estira trineos o corre en la nieve. Pero él es feliz a pesar del clima.
Descansa en un zaguán, toma agua de su baldecito, teniendo el suficiente cuidado de meter bien las dos patas delanteras para refrescarse.
Cuando viene un leve viento sur se vuelve loco de contento y corre de aquí para allá.
Cuando llego a casa, él me recibe alegre y hasta me abraza (literalmente, en serio...).
Como vive con mi otro perro, trata de ladrar, pero obviamente no le sale. Como resultado de su esfuerzo sale un ruido tan extraño y peculiar de él, es para llorar de risa!
Se lo tiene siempre por un perro poco inteligente, en mi casa, papá y Hernán tienen ese concepto de él.
A pesar de eso, creo yo que mi perro Simón es un animal mucho más inteligente de lo que la gente cree.
Nunca hace lo que se le ordena ni pide, siempre, siempre hace lo que se le antoja. Quien no quisiera hacer lo que se le antoja todo el tiempo, no?
Vida de perros... No sé, vida de mi perro, ya quisiera tenerla yo.